Antes de salir de mi casa, cuento el dinero que tengo en la bolsa.
Quince pesos, ni más ni menos
Administro mi dinero:
Con un peso imprimiré esta hoja, así podré entregartela antes de que me mandes al carajo.
Dos pesos me servirán para completar el costo de tu camión,
te conozco, sé que siempre llevas una moneda de cinco pesos en tu cartera de mano.
Cuatro pesos más me servirán para comprar un cigarro,
uno de esos que son de sabores, que me asquean a la primer bocanada,
los enciendo con la intención de dejar de fumar, pero cada día les tomo más gusto.
Toma, te debía tres pesos, no me acuerdo ni por qué, pero la culpa de deberte algo me mata cada que me preparo para dormir.
Otros dos pesos se los daré al primer tipo que llegue cantando, bailando, tocando o haciendo cualquier actividad en la calle en busca de: "lo que sea mi voluntad"
Gastaré dos pesos en comprar un taco, de esos que no tienen ni carne, ni sabor, ni consistencia, pero !ha¡ como se disfrutan los desgraciados cuando no tienes nada en los bolsillos
el último peso probablemente se perderá en alguna de las bolsas de mi chamarra,
Puede que lo encuentre dentro de un par de días,
tal vez con él, complete la compra de un cigarro,
tal vez también lo regale,
tal vez lo use para pagar el peso que te voy a pedir después de entregarte la hoja,
con la esperanza de que no me mandes al carajo,
solo porque te debo un peso.
